Acabas de comprarte el nuevo teléfono inteligente compatible con carga rápida inalámbrica. Sin embrago, cuando lo colocas sobre el cargador inalámbrico para recargarlo, los resultados son todo menos rápidos. A continuación, te ofrecemos una lista de los pasos a seguir para obtener la velocidad más rápida al cargar tu teléfono de forma inalámbrica.
Tira tu viejo cargador de pared
Tu cargador inalámbrico sólo puede emitir la misma potencia de carga que la que recibe del cargador de pared. Si todavía sigues utilizando ese viejo cargador de pared que has tenido tirado en casa durante años, es muy probable que sólo genere unos míseros 5 W (o menos), que no serán suficientes para una carga rápida. El cambio a un cargador de pared de 12 W como mínimo que sea compatible con la tecnología USB-C Power Delivery (como el cargador Rewind C USB-C de Moshi) dará a tu cargador inalámbrico toda la potencia que necesita para proporcionar a tu teléfono una carga rápida.
Utiliza la conexión adecuada
Al igual que los cargadores de pared, los cables más viejos y baratos puede que no proporcionen suficiente energía para una carga rápida. Si tu cargador inalámbrico está equipado de USB-C, intenta actualizar el cable a uno que sea compatible con la especificación USB-C Power Delivery, especialmente diseñada para suministrar altos niveles de energía a los dispositivos para una carga rápida. El cable de carga USB-C Integra™ de Moshi es la opción ideal.
Sigue el protocolo
Varios fabricantes de smartphones utilizan protocolos propios para ofrecer velocidades de carga rápida. Esto significa que si tu cargador inalámbrico no es compatible con dichos protocolos, tendrás que conformarte con una potencia de tan solo 5 W y velocidades de carga frustrantemente lentas. Asegúrate de utilizar un cargador inalámbrico que sea compatible con los protocolos patentados de Apple (7.5 W) y Samsung (9 W) como los de la colección Q de Moshi.
Mantén la calma y una temperatura adecuada
El exceso de calor es el principal enemigo de la carga inalámbrica, ya que la cantidad de energía que una batería aceptará para su carga se reduce a medida que la temperatura de la batería aumenta. Utiliza un cargador inalámbrico que esté bien diseñado para reducir la acumulación de calor (como la colección Q de Moshi) y mantén tu habitación a una temperatura no superior a 25° C (77° F).
¿Has seguido todos estos pasos y tu cargador inalámbrico sigue sin funcionar correctamente? Tal vez sea hora de una actualización. Echa un vistazo a nuestra colección Q de cargadores inalámbricos premium de carga rápida en Moshi.com.
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